El
siervo de Dios Pío Alberto Del Corona nació en Livorno el 5 de Julio del
1837, cuarto hijo del matrimonio Giuseppe y Ester Bucalossi, humildes
negociantes de calzado. Sobre la santa colina de Montenero, a pocos
kilómetros de Livorno, a los pies de la venerada imagen de María,
Patrona de Toscana, a la edad de 17 años tomó la última decisión de
consagrar su vida a Dios.
El 4 de Diciembre del 1854 Albertino, come lo llamaban en su familia,
rogó a su padre de llevarlo a Florencia, donde se presentó en el
convento dominico de San Marcos.
El
1 de Febrero de 1855, vigilia de la Purificación de la Virgen María, a
las 4 de la tarde vistió por primera vez el hábito dominico. El 3 de
Noviembre del 1859 pronunció su profesión religiosa. Fue ordenado
sacerdote en Florencia el 5 de Febrero del 1860 en la basílica de San
Marcos, celebrando su primera Misa en el domingo siguiente, 12 de
Febrero.
El 8 de Mayo del 1872, junto a Pía Elena
Bruzzi Bonaguidi fueron recibidos en audiencia por el beato Papa Pío IX,
quien con su Bendición Apostólica y su imprimatur personal: “Bene, bravi,
benissimo”, aprobó la fundación de Padre Pío Alberto y Madre Pía Elena
de la Congregación Hermanas Dominicas del Espíritu Santo y su “Asilo”.
Algunos meses después, Padre Pío Alberto fue elegido Prior del Convento
de San Marcos. Recibió la consagración episcopal en Roma el 3 de Enero
del 1875 de manos del Cardenal Patrizi en la Iglesia de San Apolinar,
como obispo coadjutor de San Miniato.
Llegó a San Miniato al atardecer del 18 de Enero del 1875 donde
permaneció por 32 años. En 1897, a l amuele del viejo obispo, se
convirtió en el décimo octavo obispo de San Miniato. El 30 de Agosto
1906, gravemente enfermo, devolvía su mandato en las manos del Papa Pío
X, que no aceptó, agregándole la responsabilidad de Administrador del
Archi obispo Maffi de Pisa.
Mons.Pio in visita pastorale nelle campagne della sua diocesi.Un vassoio
d’argento regalato dai samminiatesi a Mons.Pio nel 1877, segno del
profondo affetto che subito si era instaurato fra il pastore e i suoi
fedeli.
No
regresó mas a San Miniato, dividiéndose por seis años entre el “Asilo” y
el convento dominico de Fiesole. Un año después, el 31 de Septiembre del
1907, Pío X, creando cardenal a Mons. Maffi, nominó a Carlo Falcini
obispo de San Miniato y a Mons. Del Corona Arzobispo titular de Sardica.
En 1910, celebrándose el 50º aniversario de su ordenación sacerdotal, el
Papa Pío X quiso escribirle de su puño una carta. La mañana del 10 de
Agosto, recibió la Unción de los Enfermos, mientras el Santo Padre
envión la Bendición Apostólica en artículo mortis.
En
el alba de 15 de Agosto del 1912, solemnidad de la Asunción al cielo de
la Virgen María, después de haber predicho para este día, su muerte,
mirando fijo al cielo, entregó su alma a Dios. Tenía 75 años, un mes y
nueve días.
Sepultado en el cementerio de la Misericordia de Florencia, donde la
tumba fue constantemente objeto de visitas y peregrinaciones de los
fieles, el 21 de Febrero del 1925 el cuerpo fue trasladado a la cripta
del Monasterio de sus hijas espirituales en Vía Bolognese 111 en
Florencia.
En
1942 se abrió el proceso de beatificación ante la diócesis de San
Miniato en cuyo acto actualmente están la Congregación Vaticana para la
Causa de los Santos.
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